jueves, 14 de abril de 2011

QUIERO AÑEJAR ESTE AMOR

NB: El siguiente texto está constituído por versos endecasílabos rimados en segunda y cuarta línea. 1. Florecida de amor siento mi entraña. Mi pasión ha llegado al frenesí. Ya tu amor penetró en mi caracú. Y mi carne impregnada está de ti. 2. Advierto que mi piel humeando está. Encendida por ti que eres mi sol. ¡A la lava mi sangre se asemeja! Y su calor...me tiñe de arrebol. 3. Prisionera de múltiples encantos de tu recia figura estoy prendada. Ya no puedo mirarte sin que arda en mi cuerpo candente fogarada. 4. Has logrado una alquimia misteriosa. En el mío tu ser has transferido. Y hoy soy presa de crudo narcisismo ¡que jamás en mi vida había tenido! 5. Esta imagen que admiro en el espejo que me impulsa a gritar un ¡Aleluya! no refleja mi rostro enamorado. ¡Para mí esa imagen es la tuya! 6. ¡Inundada me siento por tu amor! Pero advierto que aún no es suficiente. ¡Necesito añejar mi gran amor! Cual el vino se añeja en recipiente. 7. Que este amor sea cual vino milenario añejado en vasija de buen roble. Para ello quisiera transformarme en tonel grande de madera noble. 8. En mi ser este amor mejoraría como caído en bodega imperturbable. Deliciosa manera ésta sería de lograr un amor más adorable. 9. Mis temores yo quiero disipar. No quiero que tu imagen ¡tan galana! -que a mí me tiene hoy esclavizada- se disipe en el día de mañana. 10. Yo no quiero quebrar esta ilusión. Del ensueño no quiero despertar. Me aterra suponerme equivocada y en rutina ¡volver a naufragar! 11. Me hastía el vacío cotidiano que produce el amor no perdurable. Yo no admito siquiera suponer que el amor infinito sea improbable. 12. ¡Otrora yo reía del amor! Él era un sentimiento sensorial. Sexo puro que roza el corazón nada más que de modo tangencial. 13. El roce con la piel de algún varón en mi piel producía un breve fuego. Mi alma no vibraba con mi carne. Aquello era...solamente un juego. 14. De aquel entonces el error yo pago. Y vivo enloquecida de pasión. Cautiva de las rejas que a mi alma le pusieron mi carne y corazón. 15. ¡Pero soy feliz en este encierro! ¡Este amor es mi gran felicidad! Seguiré sus licores añejando... ¡y que perdure una eternidad! VERA VALDOR

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