viernes, 21 de septiembre de 2012

E N V I D I A E S T E L A R

1. Vengo a confesarme a ti, soberano espectador.
  Esta humilde comediante viene a implorar tu favor.
2. Es mi pecado mayor mi oscura mediocridad.
  La he venido ocultando detrás de mi vanidad.
3. Hoy aquí digo verdad sin disfrazar lo que pienso.
  Mostraré mi alma desnuda.  Mi confesión ya comienzo.
4. No habrá ni velo ni lienzo que disimule mi herida.
  Mi pecado capital me ha hecho mujer sufrida.
5. Llegó la hora temida de confesarles a ustedes
  que soy mujer envidiosa y de bajos procederes.
6. No cumplo con mis deberes de cristiana caridad.
  Mi envidia vive y se nutre de mi pequeña maldad.
7. Protege mi vanidad creada con artificio,
  mi menguada calidad que disimula mi oficio.
8. Es la envidia triste vicio que intoxica el sentimiento.
  Yo difamo por envidia.  Es por envidia que miento.
9. Cuando calidad presiento en algún colega mio,
  de disminuirlo trato. En forma ostensible río.
10. Queda mi corazón frío por la envidia traspasado.
  Lo que yo quisiera ser lo veo en él retratado.
11. Perdón...Por lo que he observado, ha producido sorpresa
  esta extraña confesión dicha con cierta entereza.
12. Diré, con delicadeza, que la gente se equivoca.
  Y lo voy a demostrar en cuanto a lo que me toca.
13. No, señores. ¡No estoy loca!  Soy figura popular.
  Es elogiada por muchos mi forma de interpretar.
14. Muchos suelen exclamar"¡Que gran actriz que es Fulana!"
  Y esos elogios me hieren aunque la intención sea sana.
15. Despierto cada mañana con una gran frustración.
  Elogios, dinero, aplausos, no me causan emoción.
16. Hay aquí una confusión. Se toma por real valía,
  por virtud profesional, lo que sólo es simpatía.
17. Y esta confusión me hastía. Yo sé que no soy actriz.
  Y es esta seguridad lo que me hace infeliz.
18. No ha mucho estuve en un tris de proclamar que sufría
  por no poder alcanzar la meta que pretendía.
19. Me lo impidió cobardía.  Pero llegó el momento,
  para mí impostergable, de expresarles lo que siento
20. Es profundo mi lamento al contemplar mi impotencia
  para llevar a la escena de una heroína la esencia.
21. Pues es vana mi presencia corporalmente en escena
  si no alcanzo a transmitir una alegría, una pena.
22. Y no logro ser amena si es un papel muy reidero.
  No hay calidad en mi trabajo. Ya lo he dicho y lo reitero.
23. ¡Por ser gran actriz me muero! Mas nunca lo podré ser...
  El día que lo advertí empezó mi padecer.
24. Ya no me basta con ser figura muy aplaudida.
  No me basta que se paguen mis elogios sin medida.
25. Pues yo daría mi vida por sentirme buena actriz.
  Por envidiar a quien lo es me siento muy infeliz...  

     VERA VALDOR, actriz y autora.
  
  
   

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