viernes, 30 de septiembre de 2011

SERE UN EDREDON DE CANDENTES LLAMAS

Me trastorna tu fría indiferencia.
Ella logra aumentar mi calidez...
Ignoras mi presencia arrolladora
que no puede quebrar tu impavidez.

Al mirarte abastezco el dulce fuego
que me entibia de a poco, con placer.
Y comienza a agitarse en mis arterias
lo que anhela mi ser satisfacer.

¡Ya comienza mi sangre el movimiento
que me llena de gozo el corazón!
Y acelera su tránsito vital
convirtiendo su paso en aluvión.

Tú no adviertes mi ruego muy sutil.
Tu lejana actitud indiferente
enardece mi carne hasta el delirio
recorrida por sangre asaz candente.

Tu abstracción y tu ausencia tan lejana, las fibras de mi piel hacen vibrar.
¡Me siento la espiral enloquecida de un fuego que comienza a restallar!

Desórden visceral en mí produces y siento en mi interior la sensación
que vísceras y órganos navegan por mi sangre ya en plena ebullición.

Yo advierto que mi piel, mi cuerpo entero, merced a lo excesivo de mi amor,
en edredón de llamas se convierte. ¡Flamígero y candente cobertor!

Una ígnea intención acude a mí. En un marco de llamas ¡darte un beso!
Que quede de tu cuerpo incinerado solamente la esquirla de algún hueso.

Cual edredón de llamas destructoras tu cuerpo con el mío he de abrasar.
De tu torpe, glacial indiferencia ¡mi cálida pasión se ha de vengar!

VERA VALDOR
Posted by Picasa

No hay comentarios:

Publicar un comentario